¿Cómo curar la psoriasis en los pies?

La psoriasis es una afección que padece aproximadamente el 3% de la población mundial y, entre los diferentes subtipos, la psoriasis en los pies es una de las más comunes, aunque debido a que esta parte del cuerpo suele permanecer oculta la mayor parte del tiempo, suele pasar desapercibida a simple vista y no le prestamos la atención que merece.

La psoriasis en la planta de los pies está vinculada a trastornos autoinmunes y, sorprendentemente, en muchos casos no se diagnostica correctamente o, directamente, no se acude a un dermatólogo o podólogo especializado para que pueda valorar el problema.

Y, a pesar de que por el momento no se ha encontrado una cura definitiva, existen diferentes medidas para la prevención y el tratamiento de la psoriasis en los pies que ayudarán a aliviar los síntomas y a reducir el riesgo de brotes.

¿Qué es la psoriasis en los pies?

La psoriasis en los pies es una condición dermatológica crónica que se caracteriza por la presencia de parches enrojecidos y escamosos en la piel, que en el 99% de los casos van acompañados de picazón y molestias.

Esta enfermedad puede manifestarse en cualquier parte del cuerpo, siendo el cuero cabelludo, los codos, las rodillas y la parte inferior de la espalda las más comunes, mientras que los pies es una de las zonas menos habituales, principalmente porque suelen estar cubiertos y protegidos.

Clínicamente se le conoce como psoriasis pustulosa palmoplantar, que es el nombre que recibe la enfermedad cuando únicamente se manifiesta en las palmas de las manos y las plantas de los pies, caracterizándose por la formación de ampollas llenas de pus, que aunque no son infecciosas, pueden causar irritación.

Tipos de psoriasis en los pies

La psoriasis en los pies puede manifestarse de diversas formas y se clasifica según su gravedad y el patrón de las escamas, que pueden ser en placas, pliegues, gotular, eritrodérmica, pustular, entre otros.

Desde la perspectiva podológica, hay tres tipos de psoriasis en los pies:

1. Psoriasis en la piel: con comparación con la psoriasis en las uñas, la piel de los pies es más receptiva al tratamiento tópico, lo que facilita su manejo. La regeneración de la piel también es más rápida que el crecimiento de las uñas.
2. Psoriasis en las uñas: las afecciones ungueales pueden ser especialmente molestas, ya que las uñas se vuelven blandas, quebradizas y frágiles. Esto las hace más susceptibles a las infecciones por hongos y otros problemas, como las uñas encarnadas. En casos graves, puede incluso perderse completamente la uña.
3. Problemas articulares: en los casos más graves, la psoriasis puede llegar a afectar a las articulaciones, siendo necesario el uso de medicamentos orales, así como de fisioterapia y terapias físicas como estiramientos y movimientos pasivos.

¿Cómo tratar la psoriasis en los pies?

Debido a la constante exposición y al uso que hacemos de ellos en el día a día, el tratamiento de la psoriasis en los pies es fundamental, ya que el constante roce y la presión pueden aumentar la irritación de la piel, empeorando los síntomas y alargando la recuperación.

Pero, ¿cómo curar la psoriasis en los pies? Por el momento esta enfermedad no tiene cura, pero sí existen una serie de pautas para aliviar los síntomas.

Por ejemplo, el uso de cremas específicas para la psoriasis es fundamental para aliviar el picor y la incomodidad, así como para reducir las escamas y fortalecer la barrera de la piel. Estas cremas contienen activos hidratantes, exfoliantes y emolientes que penetran profundamente y ayudan a tratar las placas y heridas de manera efectiva.

A continuación, te damos algunos consejos útiles para el cuidado de los pies con psoriasis:

• Utiliza jabones suaves para evitar la irritación adicional de la piel, preferiblemente con ingredientes naturales como la glicerina.
• Evita lavar los pies con demasiada frecuencia y utiliza agua tibia en lugar de caliente para reducir la irritación.
• Hidrata la piel regularmente con cremas para pies específicas con propiedades hidratantes.
• Protege tus pies utilizando calcetines y calzado cómodo que no roce ni irrite la piel afectada.
• Evita la fricción en las zonas afectadas por la psoriasis y no apliques productos que puedan resecar la piel.

A pesar de todos estos cuidados, si padeces psoriasis en los pies o en cualquier otra zona del cuerpo, debes consultar a un dermatólogo para obtener recomendaciones específicas y un plan de tratamiento personalizado que se adapte a tus necesidades individuales.