¿Cómo tratar el sarpullido en la cara?

El sarpullido en la cara es una afección de la piel que produce inflamación, irritación y mucho picor, que se manifiesta en forma de manchas o erupciones rojas que, de no tratarse, pueden irritarse y resultar muy molestas, llegando a crear ampollas e incluso, producir la descamación de la piel.

Las causas del sarpullido en la cara pueden ser muy variadas, y lo mismo ocurre con los síntomas, que dependerá de la gravedad de cada caso.

Las alergias, infecciones y la dermatitis son las principales razones de esta erupción cutánea en la cara, que es mucho más propensa a aparecer en aquellas personas que tienen la piel sensible y delicada. 

En este post vamos a explicar por qué sale el sarpullido en la cara de repente y cómo tratarlo, dándote una serie de recomendaciones que te ayudarán a aliviar los síntomas.

¿Por qué sale el sarpullido en la cara?

Como hemos comentado, el sarpullido en el rostro puede aparecer por diferentes causas, entre las que destacamos las siguientes:

Sarpullido en la cara por alergia

Las alergias pueden ser responsables de los sarpullidos faciales, a causa del contacto de la piel con un producto que provoca una reacción alérgica. Para evitarlo,  es importante evitar los productos que puedan provocar alergias , que pueden ser alimentos, productos cosméticos o accesorios.

Acné

El acné es una afección de la piel que en los casos más graves puede causar sarpullidos, afectando tanto a adolescentes como a adultos. Aunque se asocia comúnmente con la piel grasa, puede ocurrir en cualquier tipo de piel.

Calor

La erupción por calor es otra causa común de sarpullidos, especialmente en climas cálidos. Cuando una persona suda demasiado y los poros se obstruyen, pueden desarrollarse erupciones o sarpullidos,  agravados por los ácidos del sudor en contacto con la piel. 

Infecciones

Las infecciones también pueden provocar sarpullidos, como la varicela o el sarampión, que pueden producir ampollas y sarpullidos en todo el cuerpo, incluida la cara.

Irritación

La irritación, como la que ocurre después del afeitado en los hombres, es otra causa de sarpullidos faciales. Esto se debe a que los pelos cortados pueden irritar los folículos pilosos. Para prevenirlo, se recomienda aplicar un after shave hidratante con la piel húmeda para ablandar los pelos.

Dermatitis

Las personas con dermatitis suelen tener la piel sensible y necesitan usar productos hipoalergénicos para tratarla, teniendo tendencia a padecer sarpullidos, especialmente en épocas de calor.

Psoriasis

La psoriasis puede provocar sarpullidos en el rostro, acompañados de sequedad y descamación de la piel, así como heridas que pueden infectarse si no se tratan adecuadamente. El tratamiento suele implicar el uso de cremas para la psoriasis específicos.

Principales síntomas del sarpullido en el rostro

Aunque dependerá de cada caso en cuestión, estos son los síntomas del sarpullido en el rostro más habituales, que pueden afectar en mayor o menor medida:

• Erupción cutánea: una erupción visible en la piel de la cara, que puede manifestarse como pequeñas protuberancias, enrojecimiento, parches escamosos o incluso ampollas.
• Picazón: la piel afectada por el sarpullido puede experimentar picazón intensa o irritación, provocando la necesidad de rascarse.
• Sensibilidad: la piel afectada puede volverse sensible al tacto, provocando molestias o dolor al tocarla.
• Inflamación: en algunos casos, el área afectada puede hincharse ligeramente debido a la irritación y la inflamación de la piel.
• Descamación: dependiendo de la causa del sarpullido, la piel afectada puede desprenderse o descamarse, especialmente si el sarpullido está asociado con condiciones como la dermatitis o la psoriasis.
• Ampollas: en casos más graves o específicos, el sarpullido en la cara puede presentarse en forma de ampollas llenas de líquido, que pueden ser dolorosas o provocar sensaciones de ardor.

Tratamiento para el sarpullido en la cara

El tratamiento del sarpullido en el rostro variará dependiendo de la causa que lo haya desencadenado, siendo fundamental recibir atención médica lo antes posible para obtener un diagnóstico preciso y así, recibir el tratamiento más adecuado.

En el caso de los sarpullidos por alergias en la cara, los médicos a menudo recetan antihistamínicos, además de  evitar la sustancia desencadenante. 

Para problemas relacionados con el sistema inmunológico, se suelen recetar inmunomoduladores para regular la función del sistema inmunológico, dependiendo de la naturaleza específica del trastorno.

¿Qué hacer con el sarpullido en la cara? Consejos para aliviarlo

Más allá del tratamiento indicado por el especialista, existen una serie de consejos y remedios para el sarpullido en la cara que evitarán que los síntomas empeoren y ayudarán a que la piel se recupere.

Limpieza suave: lava tu cara con un limpiador facial suave y sin fragancia para eliminar cualquier suciedad, sudor o irritante que pueda estar contribuyendo al sarpullido, evitando frotar la piel para no empeorar la irritación.

Aplicación de compresas frías: coloca compresas frías o paños suaves empapados en agua fría sobre el área afectada para ayudar a reducir la inflamación y aliviar la picazón.

Hidratación: aplica siempre una crema hidratante suave después de limpiar el rostro para ayudar a mantener la piel hidratada y protegida.

Evita los irritantes: identifica y evita cualquier producto o sustancia que pueda estar irritando tu piel y contribuya al sarpullido. Esto puede incluir cosméticos, productos para el cuidado de la piel, fragancias o detergentes, entre otros.

Utiliza protector solar: si necesitas salir al exterior, asegúrate de aplicar siempre un protector solar suave y de amplio espectro con un SPF adecuado para proteger tu piel del sol y prevenir una mayor irritación.

Evita rascarte: aunque resulte tentador, evita rascarte o frotar la piel afectada, ya que esto puede empeorar la irritación y aumentar el riesgo de infección. Ahora que ya conoces tanto las causas como el tratamiento, lo tendrás más fácil para evitar un sarpullido en la cara y, en caso de que aparezca, para calmarlo y aliviar los síntomas.