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Cada vez más demandada en los salones de uñas, la manicura rusa es una tendencia que viene pegando fuerte, realizada con tornos y en la se quita totalmente la cutícula para dejar la uña perfectamente limpia.
Conocida desde hace pocos años en España, el término “manicura rusa” se debe a que las rusas fueron las primeras en trabajar con esta técnica. Es de sobra conocido que a las mujeres del este y especialmente de Rusia, les encanta cuidarse.
Ideal para darle un toque innovador y exclusivo a tus uñas, hoy en Druni te contamos qué es la manicura rusa y cómo hacerla en casa tú misma.
¿Qué es la manicura rusa?
Una tendencia en el sector de la estética y en el cuidado personal, la manicura rusa se centra en eliminar la cutícula para conseguir unas manos totalmente limpias y cuidadas, con un acabado perfecto. De ahí su éxito.
Para llevarla a cabo, hay que retirar la cutícula suavemente y aplicar el esmalte los más cerca posible. De esta forma, la manicura dura mucho más tiempo, gracias a que el producto se adhiere mucho mejor a la uña natural, pudiendo llevar las uñas sencillamente perfectas durante prácticamente un mes.
En cuanto al esmaltado, puedes elegir entre esmaltado normal o permanente, así como realizar la manicura con uñas acrílicas o de gel, o dejarlas naturales.
Diferencias entre la manicura rusa y la manicura convencional
La principal diferencia está en que las uñas rusas lucen una manicura perfecta, con la ventaja de que los resultados se mantienen con el paso del tiempo, permitiéndote llevar las uñas muy cuidadas durante tres – cuatro semanas. Algo impensable con la manicura convencional.
Se realiza una técnica mucho más precisa, y cuanto mejor se aplique, más tiempo se mantendrán las uñas en buen estado, independientemente de que se realice con esmaltado tradicional, permanente o uñas esculpidas.
Además, al tener que realizar la manicura con menos frecuencia, la uña se endurece más y se conversa en mejores condiciones.Manicura rusa paso a paso
Aunque lo más recomendable, sobre todo las primeras veces, es acudir a una profesional, vamos a ver cómo hacer la manicura rusa paso a paso.
- Tratar la cutícula:
El primer paso es preparar la base de la uña levantando la cutícula sobrante con un empujador de cutículas y, con mucho cuidado y suavidad, limar el exceso de los bordes.
En Druni ponemos a tu disposición este empujador de cutículas con doble punta Semilac, perfecto para empujar las cutículas y conseguir que queden apartadas, consiguiendo un resultado de esmaltado impecable. Está hecho de acero quirúrgico de alta calidad y resulta muy práctico, cómodo y fácil de limpiar.
- Limpiar la piel:
Lo siguiente es limpiar la piel de los bordes de la uña, prestando especial a un posible exceso de células muertas por alrededor y encima de la uña natural. Para ello, utilizar un cepillo y posteriormente aplicar un gel desinfectante.
- Pulir la uña:
Después hay que limar la superficie de la uña con cuidado, del mismo modo que preparamos la uña natural para realizar un esmaltado permanente o gel acrílico. ¿Nuestro consejo? Limar únicamente la capa brillante de la parte superior.
- Esmaltar:
Por último solo queda esmaltar, y si se trata de unas de gel o acrílicas hay que esculpirlas con un molde. En cambio, en un esmaltado permanente o normal, primero hay que aplicar la base, después dos capas de esmalte y acabar con un top coat.
Conclusión
La manicura rusa es tendencia y como hemos comentado, es una técnica que se centra en tratar de forma exclusiva la cutícula de las uñas para conseguir unas manos más limpias, cuidadas y sencillamente preciosas. Esta es la principal diferencia respecto a la manicura convencional, que trata toda la mano y las uñas.
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🟢 Última actualización: 11/01/2023