¿Qué son los tampones y para qué sirven?

El uso de tampones es muy habitual, mostrándose como una alternativa a las compresas que ofrece una mayor comodidad y libertad.

Aunque hay que reconocer que un primer momento pueden resultar algo intimidatorios y puede costar dar el paso, por eso, en Druni vamos a explicar qué son los tampones y para qué sirven, con el objetivo de resolver posibles dudas que puedan tener aquellas personas que todavía no se han atrevido a llevarlos.

¿Qué es un tampón?

Un tampón es un producto de gestión menstrual que puede utilizarse desde la primera regla, que cumple con la misma función que la compresa.

Los tampones tienen forma de tubo y están diseñados para introducirlos en el interior de la vagina de forma sencilla, ya que incorporan un aplicador que facilita tanto su colocación como su expulsión, además de favorecer la higiene. Cuando lo tienes puesto, por fuera quedará un fino hilo de extracción del que tendrás que tirar cuando vayas a quitártelo.

En su interior contiene un núcleo absorbente que se encarga de absorber el sangrado, compuesto por materiales de fibras blandas comprimidas y altamente absorbentes,  evitando así que pueda haber fugas y que la ropa interior se manche de sangre.  El tampón va cubierto por una malla y el tubo aplicador exterior.

Totalmente seguros, los tampones están regulados por la FDA como dispositivos médicos, siendo importante destacar que deben desecharse después de su uso. Existen tampones reutilizables, los cuales desaconsejamos enormemente tanto por higiene, como porque aumentan el riesgo de sufrir infecciones, hongos o bacterias.

¿Para qué sirven los tampones?

Los tampones se encargan de absorber la sangre de la menstruación, del mismo modo que las compresas, con la diferencia de que lo hacen desde el interior de la vagina.

Su función es absorber la sangre antes de que salga del cuerpo,  teniendo una duración de entre 4 y 6 horas aproximadamente.  Dado que no se puede ver si el tampón está lleno o no, es importante no llevarlos más tiempo para evitar mancharse la ropa interior.

Principales ventajas de los tampones respecto a las compresas

Aunque es cierto que ambos cumplen con la misma función, los tampones resultan mucho más discretos, ofrecen una mayor libertad y permiten tener la regla sin que nadie se entere.  Con ellos podrás bañarte en el mar o la piscina, hacer deporte y cualquier otra actividad que resulte complicada con la compresa. 

Si todavía no los has probado y tienes dudas, a continuación, te mostramos las principales ventajas de los tampones:

• Libertad:

Como hemos comentado, la principal ventaja de los tampones es la gran libertad que ofrecen respecto a las compresas, permitiéndote seguir con tu ritmo de vida normal como si no tuvieses la regla.

• Discreción:

Al llevarlos en el interior de la vagina, son mucho más discretos y pasan totalmente desapercibidos, pudiendo llevarlos puestos con todo tipo de prendas, incluso tanga, bikini o unos pantalones ajustados sin que nadie se entere.

• Comodidad:

Otra ventaja muy destacable es la gran comodidad que aportan, puesto que más allá de tener que ponerlos y quitarlos, por lo demás, será como si no tuvieses la regla. No notarás absolutamente nada, aunque eso sí,  evita llevarlos más de cuatro horas seguidas. 

• Olor:

Con los tampones no tendrás que preocuparte por el mal olor del lujo menstrual, puesto que no haber contacto con el exterior, el olor desaparece por completo.

• Deporte:

Si no hay un día que pases sin hacer ejercicio, los tampones no te limitarán al hacer deporte, como sí puede ocurrir con las compresas. Podrás llevarlos cómodamente y sin riesgo de que puedan salirse, incluso durante la práctica de los deportes más exigentes. Podrás hacer hasta natación.

• Irritación:

Con los tampones también evitas el roce con la piel de la compresa, lo que te ayudará a evitar la irritación de la zona,  especialmente durante los meses de verano con la subida de las temperaturas. 

Como ves, son muchas las ventajas que ofrecen, aunque, eso sí, los tampones deben utilizarse de forma adecuada, siguiendo las indicaciones del fabricante, y extremar la higiene de la zona para evitar posibles infecciones.

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